7 consejos para correr con el perro sin problemas
Educación y diversión
Salir a correr con tu perro puede motivarte para salir más a menudo. Correr con tu compañero te puede ayudar a abandonar el sedentarismo, pero debes prepararte. En este post encontrarás algunos consejos para animarte a salir a correr con el perro y a hacerlo de manera saludable.
Salir a correr con tu perro puede motivarte para salir más a menudo. Correr con tu compañero te puede ayudar a abandonar el sedentarismo, pero debes prepararte. En este post encontrarás algunos consejos para animarte a salir a correr con el perro y a hacerlo de manera saludable.
Salir a correr con tu perro puede motivarte para salir más a menudo. Correr con tu compañero te puede ayudar a abandonar el sedentarismo, pero debes prepararte. En este post encontrarás algunos consejos para animarte a salir a correr con el perro y a hacerlo de manera saludable.
CONSEJOS PARA CORRER CON EL PERRO
Estos son algunos consejos para lograr que salir a correr con el perro sea una historia de éxito.
Ten en cuenta su raza y edad
Todos los perros pueden ser corredores, aunque es más aconsejable para unos que para otros. Correr no es un ejercicio exigente y menos para los perros. Aún así, hay razas más preparadas que otras para el deporte, como los perros de pastoreo, los de caza o incluso razas pequeñas como los terriers.
Además, si es muy joven el ejercicio en exceso puede dañar sus articulaciones, ya que su cuerpo todavía no está totalmente formado. Si tu cachorro es de raza pequeña, espera hasta los 6 meses, y si tu cachorro es de raza grande, es mejor esperar hasta los 10 o 12 meses.
No corras al sol
Los perros no transpiran como los humanos. Sus únicas glándulas sudoríparas están en las almohadillas de las patas y no tienen mucho efecto. El sistema de eliminación que utilizan es el jadeo, que resulta mucho menos eficaz.
Por ello es importante evitar correr al sol o cuando hace mucho calor, ya que el riesgo de que le dé un golpe de calor es alto. A partir de los 20ºC hay que tener cuidado y es aconsejable llevar siempre una botella de agua.
Visita al veterinario
Los perros también necesitan revisiones médicas, sobre todo si no han hecho deporte antes. Es importante llevarlo al veterinario para que le haga una revisión y compruebe que no tiene ninguna lesión. Este chequeo debe ser anual. ¡Es una tranquilidad saber que tu perro está bien!
Si durante el ejercicio notas algún comportamiento extraño, como cansancio excesivo, cojera… avisa inmediatamente a tu veterinario.
Correa específica
Para correr con el perro, la correa debe ser especial: cómoda tanto para él como para ti. El perro debe llevar un arnés ergonómico que no limite sus movimientos. La correa debe ser más flexible, pero no extensible, y de una longitud máxima de 2 metros. Tú debes utilizar un cinturón ancho y acolchado en el que atar la correa.
Alimentación
Cuando salgas a correr con el perro debe haber transcurrido como mínimo 1 hora desde que comió o bebió por última vez. El estómago de un perro es como un tanque de retención durante la digestión, por lo que comer en las horas cercanas al ejercicio puede provocar problemas gástricos o hinchazón.
Al regreso, es mejor esperar a que se tranquilice antes de ofrecerle comida. Puede beber agua, pero es importante que no beba mucha, ni demasiada de golpe.
Cuando jadean, los perros tragan aire, y no es aconsejable que lo traguen junto a un gran volumen de líquido, ya que pueden desarrollar complicaciones, a las que las razas grandes o gigantes están más predispuestas.
Elige la superficie
Recuerda que tú vas con zapatillas pero tu perro va descalzo. Sus patas están preparadas para salir a la calle sin necesitar protección, pero el asfalto o la tierra excesivamente dura pueden dañar sus almohadillas plantares y provocar lesiones.
A medida que se acostumbre a las salidas, tendrás más libertad en cuanto a la superficie, pero al principio es mejor correr sobre hierba, arena o tierra blanda, y limpiarle las almohadillas de las patas con agua tibia y jabón.
Solo si corréis sobre nieve helada o superficies rocosas puede necesitar alguna protección especial. También existen métodos para endurecer las almohadillas que te puede recetar el veterinario.
Entrena gradualmente, y ¡descansa!
Aunque los perros tienen más aguante y pueden ir más rápido que nosotros, también se cansan. Deja que se acostumbre poco a poco. Y recuerda que no es pecado no salir cada día. Tu cuerpo, y el de tu perro, necesita descansar para tener energía renovada.
Como ya has visto, correr con el perro puede ser una gran experiencia, pero es importante seguir una serie de consejos para garantizar que así sea. ¡Ya solo falta que te calces las zapatillas y salgas con tu perro a descubrir mundo!