La evidencia actual respecto al uso de hueso para perros, recomienda no utilizarlos como snacks debido a sus potenciales riesgos para la salud, algunos de los cuales pueden ser muy graves. En este artículo veremos con más detalle, las evidencias de por qué esta práctica no es recomendable.
¿SON RECOMENDABLES LOS HUESOS PARA PERROS?
Los huesos para perros, por sus características, pueden provocar múltiples problemas de salud. Este es el principal motivo por el que muchos veterinarios desaconsejan con firmeza su uso como snacks. Pero, exactamente, ¿qué le pueden hacer al animal para que sean tan poco recomendables? Te lo explicamos:
- Primero de todo hay que saber que no todos los huesos son iguales. Dependiendo de su forma o características, existen, entre otros, huesos largos, cortos, planos e irregulares. Los huesos largos, son los que más comúnmente se encuentran en el mercado para su uso como snacks y éstos pueden proceder de diferentes especies como por ejemplo el cerdo.
- Los huesos de gran tamaño si son muy duros, como aquellos que provienen de las extremidades de los animales, pueden provocar fracturas dentales. En menor medida, al roer, también se puede producir un desgaste prematuro de los dientes. Más tarde o más temprano, ambas situaciones requerirán el paso por el veterinario.
- Los huesos son poco digestibles y pueden alterar el tracto digestivo provocando vómitos, diarrea o estreñimiento.
- Aunque te pueda parecer que los huesos son solo minerales, pueden contener cierta cantidad de proteína. Esto es importante si tu perro es alérgico, ya que dependiendo de su sensibilidad, al morder un hueso podría tener una reacción alérgica.
- Las obstrucciones son uno de los problemas más frecuentes. Los perros son glotones y pueden tragarse trozos de alimento de gran tamaño sin pensar. Lo mismo puede ocurrir con pedazos de hueso de gran tamaño, que pueden quedarse atascados en la garganta, el esófago o en el estómago, requiriendo asistencia veterinaria urgente.
- Los huesos crudos, aunque no se encuentren directamente en tiendas de animales, hay quién los compra directamente en la carnicería. Estos huesos, al no haber sufrido un proceso térmico de higienización, pueden contener bacterias, que bajo un manejo inadecuado, pueden afectar al tracto digestivo tanto a tu perro como a tí mismo.
- Los huesos cocinados, al perder el colágeno y el agua, se vuelven más rígidos y presentan un mayor riesgo de astillarse. Por eso en tema de alimentación casera, se desaconseja totalmente darles huesos de pollo, que además son pequeños y poco resistentes, y se pueden clavar en la boca o a lo largo de su paso por tracto digestivo.
- Los bordes afilados pueden provocar heridas y cortes en la boca e incluso provocar perforaciones en el intestino, que al igual que el punto anterior, resultan de extrema urgencia.
- La FDA (Food and Drug Administration), agencia gubernamental de los Estados Unidos responsable de la regulación de los alimentos, entre otras cosas, ha reportado varios casos de muerte tras la ingestión de huesos vendidos como snacks.
Ahora, puede que te preguntes: ¿por qué la gente los usa entonces? Pues aunque algunos lo den pensando en que puede ser una fuente de minerales interesante, el motivo principal parece ser, tener al perro entretenido y que dedique un tiempo a la masticación, trabaje, y le sirva para relajarse y mejorar su bienestar. Afortunadamente existen alternativas más seguras que les pueden ofrecer los mismos beneficios, como son los juguetes mordedores, que les permiten masticar, incorporar snacks y ayudarles con el mantenimiento de su salud dental.
PERO, ¿LOS HUESOS PARA PERROS APORTAN NUTRIENTES?
Los huesos se componen, sobre todo, de agua y minerales, que en general son poco digestibles, como el calcio y el fósforo. Estos minerales no se absorben adecuadamente y se eliminan con las heces haciendo que éstas se vuelven duras o incluso cambien de color, ya que se puede apreciar, a veces a simple vista, zonas del mismo color que el hueso. Es habitual que los perros sufran problemas de estreñimiento e irritación al defecar ante el aumento de dureza provocado por el consumo excesivo de huesos.
Como hemos visto, ofrecer un hueso a tu perro puede comportarle múltiples problemas de salud y pocas ventajas nutricionales. Así que si deseas ofrecerle a tu perro un snack natural y nutritivo, ofrécele los Superfood Snacks de NATURE'S VARIETY, una gama de snacks para perro naturales, con carne o pescado como ingrediente principal y superalimentos, cocidos al horno a fuego lento, para que tu perro disfrute.
Cuenta con diferentes ingredientes y sabores, para que tu perro pueda elegir y cambiar de sabor si le gusta probar cosas diferentes.
- Superfood Snacks de salmón y pescado blanco, incluye arándanos rojos, ricos en antioxidantes, y alga marina, fuente de minerales como el yodo.
- Superfood Snacks de pollo, con coco, rico en magnesio, y semillas de chía, fuente natural de ácidos grasos omega 3.
- Superfood Snacks de pavo, con arándanos rojos y calabaza, fuente natural de fibra y vitaminas.
- Superfood Snacks de buey, con espinacas, fuente natural de hierro, y quinoa, una semilla rica en proteínas.
Ya lo sabes, cuida de él y ofrécele una alternativa a los huesos que sea más nutritiva y delicada con su cuerpo, y le aporte sabor y variedad para que tu perro disfrute.